CUENTOS DE CIENCIA FICCIÓN

45 pudo hacer muy bien, y empezó a correr. No sé dónde corrió, pero oí que la policía descubrió un par de huellas que llevan al mar. Me sentí un poco triste por ello, quería ser un poco simpática con Marco y disculparme por golpearlo en su estómago cuando tuve la oportunidad. Tres años pasaron y estaba caminando por la calle cuando tropecé con un hombre en una chaqueta negra. Era alto y vi una hebra de pelo rubio. Hice contacto con sus ojos azules antes de caminar lejos rápidamente. No sé si era Marco, pero pienso si nos volveremos a ver otra vez. FIN

RkJQdWJsaXNoZXIy Mjg3OTMy